La casualidad ha querido que el filial femenino leioaztarra dispute su primer encuentro del curso 2020/21 coincidiendo con el debut del primer equipo en División de Honor I Tras ver aplazado su debut la semana pasada, el Leioa WLB B se estrenará en la Copa EH, competición que las Federaciones Vasca y Navarra de Natación están tratando de impulsar para reactivar el waterpolo en Euskal Herria en el actual escenario de pandemia.
Las leioaztarras se medirán a sus vecinas de Claret Askartza en Sakoneta (sábado, 19:00 horas), y llegarán a la cita con el importante ‘handicap’ de no haber podido prácticamente entrenar durante las dos últimas semanas debido a las últimas restricciones sanitarias decretadas por el Gobierno Vasco, que han acarreado el adelanto del cierre de las instalaciones de Sakoneta y una notable reducción de los horarios disponibles para los entrenamientos de los tres equipos absolutos del club.
No en vano, la entidad leioaztarra se encuentra ante la paradoja de que, mientras por un lado las competiciones tanto de Liga Nacional como de Copa de Euskal Herria están protegidas por el decreto del Gobierno Vasco catalogándolas de carácter semi-profesional para garantizar su disputa, por otro lado las crecientes restricciones y limitaciones de movilidad impuestas por dicho decreto, y en especial el «toque de queda» establecido a partir de las 22:00 horas, están poniendo muchas trabas para que los equipos absolutos puedan realizar sus entrenamientos en Sakoneta, que normalmente solían finalizar a las 23:00 horas. De hecho, el espacio disponible actualmente está ocupado casi totalmente por el primer equipo femenino, mientras que los conjuntos masculino y femenino ‘B’ apenas han podido tocar agua en la última semana.
