Una manifestación convocada por Sortu ha denunciado este sábado el uso de la tortura como «práctica sistemática» contra el independentismo. Y ha terminado proyectando en la comisaría de la Policía española en Indautxu la imagen de Xabier Kalparsoro, allí fallecido en 1993.
Sortu ha pedido también anular todas las condenas que tienen como base acusaciones logradas bajo torturas.
La cita ha tenido lugar la víspera del 13 de febrero, «una fecha marcada en negro en el calendario de Euskal Herria», pues se cumplen 41 años de la detención, tortura y muerte de Joxe Arregi. Y ha concluido con la proyección en las paredes de la comisaría del retrato de Xabier Kalparsoro «Anuk», fallecido allí en 1993.
La manifestación ha partido desde la plaza Biribila de la capital vizcaina tras una pancarta con el lema «Otsailak 13, Torturaren aurkako eguna. Alde hemendik torturatzaileak!», hasta la céntrica comisaría del barrio de Indautxu. Desde allí, se ha procedido a leer un manifiesto en el que han denunciado casos de tortura pasados, así como otros más actuales.
Han recordado que en esa misma comisaría «miles de vascos han sido torturados, entre ellos cientos de bilbainos», con especial mención a Xabier Kalparsoro, cuyo caso intentó presentar la Policía española como un suicidio y que falleció un día después que Gurutze Iantzi, también víctima de esta lacra, aunque esta vez en manos de la Guardia Civil. Como la práctica totalidad de estos casos, nunca se esclarecieron.
«Los que tenemos aquí delante son quienes han impuesto su proyecto político a través de la violencia. Para garantizar la unidad de España».
Además, han transmitido su apoyo a Iratxe Sorzabal, quien recientemente relató en la Audiencia Nacional española un episodio de torturas que sufrió por parte de la Guardia Civil, así como a los procesados en el sumario 13/13 que se encuentran a la espera de la sentencia.
