La mayoría sindical de Osakidetza formada por SATSE, ELA, LAB, CCOO, UGT y ESK continúa con su dinámica de movilizaciones y ha registrado una convocatoria de huelga en todos los centros de trabajo para el próximo 28 de enero. Los sindicatos critican que el Departamento de Salud “sigue apostando por la imposición, por la falta de información y negociación, por la improvisación y por la propaganda”. Han afirmado que “no nos deja otro camino que el de la movilización para dar soluciones reales y efectivas a los problemas estructurales de Osakidetza, carencias que se han agravado con la pandemia y que han convertido la situación que se viven en los centros de trabajo en insostenible”.
Como ejemplo de lo que afirman ponen la respuesta recibida el pasado jueves por parte de la Directora General de Osakidetza. Según han informado los sindicatos, el próximo 21 de enero tienen prevista una nueva reunión de la Mesa Sectorial, por lo que recibieron la propuesta de la dirección de Osakidetza para que incluyeran dos puntos a tratar y negociar en la citada reunión. SATSE, ELA, LAB, CCOO, UGT y ESK, que ostentan más del 90% de la representación de la Mesa Sectorial y del sector, presentaron una propuesta conjunta para que se abordaran dos de los puntos de su plataforma reivindicativa. Pero, “en un alarde de su nula voluntad de abrir una verdadera negociación y poner encima de la mesa medidas concretas, Osakidetza rechazó la propuesta sindical con la excusa de que debía ser realizada por unanimidad de todos los sindicatos con representación en la Mesa” han manifestado los convocantes de las movilizaciones.
Los sindicatos también han denunciado que han sabido a través de los medios de comunicación que se iba a comenzar a vacunar al personal sanitario, a pesar de que el pasado 8 de enero se celebró un reunión encaminada a facilitarnos información sobre el proceso de vacunación y, en la misma “quedó claro que la mayoría de las cuestiones estaban en el aire y que la planificación del proceso era incipiente todavía”. Por ello, consideran “improvisado y con un claro fin propagandístico”, el anuncio el pasado miércoles de la Consejera de Salud de que se daba inicio a la vacunación del personal sanitario, si bien, los representantes del personal matizan que “lo que en realidad se anunció fue que se habían recibido 1.400 dosis de una vacuna de las cuales se van a poner 700” para una plantilla de 40.000 personas, por lo que “estamos ante una mera vacunación excepcional de unos pocos profesionales, cuya planificación se ha hecho de manera improvisada y, desde luego, opaca, en lo que respecta a la parte sindical”.
SATSE, ELA, LAB, CCOO, UGT y ESK exigen a Osaklidetza medidas inmediatas para revertir la grave situación que atraviesa el sector que concretan en una partida presupuestaria para la sanidad pública que se equipare a la media de la UE, destinando un 25 % del presupuesto de sanidad a la Atención Primaria; aumento de la plantilla, con la incorporación a la plantilla estructural de los empleos ocultos en fraude; consolidación de trabajadoras/es temporales; reversión de todos los recortes; la reversión de los servicios privatizados y medidas para garantizar la salud y la seguridad de la plantilla.