El Movimiento de Pensionistas de Bizkaia saldrá de nuevo a los balcones y ventanas a reclamar sus reivindicaciones, a la vez que recordará a quienes les han dejado en circunstancias muy duras y su solidaridad a sus familias.
Anuncia también que el día 18 de mayo, llevará a cabo también una propuesta simbólica realizando pequeñas concentraciones ante las Diputaciones y Ayuntamiento y Residencia, todo ello manteniendo escrupulosamente los requisitos sanitarios indicados en la fase 1 del proceso de desconfinamiento. Para ello, cada pueblo organizará su “movilización” en los términos y con el contenido que considere, siempre teniendo en cuenta todos los requisitos de seguridad vigentes.
Según el Movimiento de Pensionistas de Bizkaia, la gravedad de los problemas e insuficiencias detectadas ante la pandemia del coronavirus en las residencias públicas y privadas de personas mayores, sí como en la atención a las personas dependientes, “exigen medidas urgentes y a mas largo plazo que las instituciones y el sector privado no pueden eludir”.
Según el movimiento pensionista, “centenares de personas mayores fallecidas en las residencias públicas, privadas o en sus casas, tanto en Bizkaia, Araba, Gipuzkoa como Nafarroa”, como el contagio de miles de trabajadoras de dichas residencias contagiadas “por las deficiencias en los medios de protección o simplemente por su ausencia ha supuesto un precio carísimo para las personas internas y sus cuidadoras”. Considera igualmente que “las medidas preventivas ante una situación imprevista y la disposición de medios adecuados para el personal sanitario que se tenían que presuponer en las instituciones públicas y privadas habrían evitado la gran improvisación y el caos que se han dado en muchos momentos, con sus graves consecuencias”.
Recuerdan así mismo que el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria, el pasado 21 de abril envió sendas cartas a las consejerías responsables de Asuntos Sociales y Sanidad de los Gobiernos de Gasteiz e Iruña. y a los Diputados Generales de Araba y Bizkaia, en las que reclamaban “toda la información veraz, objetiva para llevar a cabo un análisis preciso de lo sucedido”, a la vez que solicitaban reuniones específicas con la intención de “plantear alternativas y soluciones a los gravísimos problemas creados”.
Una vez más, las instituciones no se han dignado ni a contestar a las misivas del movimiento pensionista, lo que interpretan como “señal de la falta de respeto que les supone este colectivo tan importante y tan castigado por los hechos descritos”. Por ello, precisamente, animan a salir de nuevo a los balcones y ventanas a reclamar sus reivindicaiones y recordar a las personas mayores fallecidas a consecuencia de la pandemia de COVID-19.
