4.500 personas participaron en la manifestación convocada por el Movimiento de Pensionistas de Bizkaia (MPB) ayer lunes en Bilbao, “para poner de manifiesto el grave problema al que nos enfrentamos para mantener unas pensiones públicas dignas para hoy y el futuro, defender unos empleos de calidad y salarios dignos y una sanidad y cuidados que atiendan debidamente a toda la ciudadanía.”
El Movimiento de Pensionistas denunció que “con la coartada de la inflación y de la guerra de Ucrania, los empresarios, la banca y los gobiernos e instituciones de Madrid, la Comunidad Autónoma Vasca (CAV) y de Nafarroa nos proponen un Pacto de Rentas con el que pretenden reducir las pensiones, los salarios y el gasto social público, mientras ellos mantienen o aumentan sus beneficios y prebendas”.
Recordaron que los y las pensionistas el año pasado perdieron un 3% frente al IPC y este año solo les han subido un 2,5% frente a una inflación que en julio ha alcanzado el 10,8%. “Lo mismo sucede con los salarios, donde el 70% de los trabajadoras y trabajadoras de la CAV no han tenido ninguna subida porque sus convenios no se han negociado o han decaído.”
También pusieron en evidencia la eliminación de los Puntos de Atención Continuada (PAC) y los recortes de horario en Osakidetza o el traslado de la cirugía cardíaca de Basurto a Cruces.
Por eso se reafirmaron en la necesidad de seguir movilizándose, y anunciaron que el lunes 5 de septiembre retornarán las concentraciones en las capitales y los otros 70 municipios en los que se han venido concentrando en favor de sus reivindicaciones. Y el 15 de octubre acudirán a Madrid para, “conjuntamente con pensionistas del resto de los Pueblos y Comunidades del Estado, manifestarnos y hacer entrega de todas las firmas recogidas en Euskal Herria y el resto del Estado.”
Más de cuatro años y medio de movilizaciones pensionistas
Los y las portavoces del MPB recordaron los más de cuatro años y medio que llevan realizando concentraciones y movilizaciones ininterrumpidas en Bilbao y las otras tres capitales vascas y en más de 70 pueblos del sur de Euskal Herria; la campaña de recogida de firmas por la revalorización de las pensiones con el IPC real, una pensión mínima de 1.080 euros y el rechazo a los planes de pensiones privados de empleo, de las que llevan recogidas más de 65.000; las mociones presentadas en 180 ayuntamientos para denunciar los problemas de la banca con la ciudadanía, que han sido aprobadas en más de 120 municipios y, también, la Bicicleta Martxan Pensionista que durante 13 días recorrió el norte y sur de Euskal Herria apoyada por unas 20.000 personas a su paso por los distintos pueblos y ciudades.
También se solidarizaron con la defensa que los pensionistas de Romo están llevando a cabo de la Nagusien Etxea del barrio, que el Ayuntamiento de Getxo pretende derribar y que ha sido desalojada recientemente con el apoyo de la Ertzaintza y de la policía local entre las protestas de cientos de personas mayores y de vecinos y vecinas del barrio getxoztarra. Los pensionistas, sin embargo, han conseguido paralizar el derribo por orden judicial y siguen defendiendo conservar el edificio y dedicarlo a cubrir las necesidades de los y las pensionistas y de otros grupos sociales de Romo.