El vecindario del barrio Las Vegas de la Travesía Iparragirre del municipio se ha movilizado hoy recorriendo las calles del centro urbano para dar a conocer su situación y las medidas que solicitan al Ayuntamiento para dignificar el barrio.
La movilización se ha iniciado con la lectura de un comunicado en el pirulí del Bulevar de la Avanzada. Posteriormente, las más de 95 personas que entre vecindario del barrio y personas solidarias con el mismo se han reunido, han recorrido la calle Sabino Arana, el Bulevar de Udondo, la calle Luis Bilbao Libano y han continuado hasta llegar nuevamente al punto de inicio, donde han dado por concluida la movilización de hoy.

Las vecinas y vecinos de Las Vegas definen su sentimiento más profundo con cuatro descriptivas palabras: desesperación, impotencia, injusticia e indignación. No obstante, parece claro que el vecindario de este pequeño núcleo de población situado entre la gasolinera de la Avanzada en sentido Bilbao y el hipermercado Eroski han decidido no conformarse y convertir su desesperación e impotencia en palancas de acción para reivindicar lo que consideran necesario para conseguir “un barrio digno, porque Las Vegas también es Leioa”.
Ya lo dejaron claro esta semana cuando colgaron de la fachada de sus casas que dan a la Avanzada una gran pancarta en la que pedían al alcalde del PNV, Iban Rodríguez, que cumpliese su promesa y saque el recinto anexo a las viviendas de este barrio que hace las funciones de depósito de los camiones de la basura del municipio, se solucionen los ruidos que genera el servicio de coches de la gasolinera cercana a sus viviendas y que Lejoan Busa llegue también hasta este enclave de Leioa.
Hoy también han dejado claro que no están dispuestos a seguir soportando “el parque móvil de los camiones de la basura a menos de 10 metros de nuestras ventanas (…) cuyos olores son insoportables y los gases contaminantes generados influyen directamente y de manera severa en nuestra salud”.
Los residentes en Las Vegas también sufren verse rodeados de supermercados y del hipermercado Eroski junto a sus viviendas, ya que “camiones de alto tonelaje pasan por delante de nuestras casas en horas nocturnas y descargan los productos cuando las vecinas y vecinos peleamos por conciliar el sueño, llegando a sufrir insomnio grave”. Así, afirma el vecindario, “no hay manera de descansar”.
A lo anterior le añaden igualmente los ruidos del lavadero de coches de la gasolinera. “Quizás no se aprecie cuando se esté allí, pero justo al otro lado están nuestras casas, y el parque del que hacen uso tanto los niños y niñas como los mayores del barrio. El ruido es insoportable, desde casa no se puede ni tener las ventanas abiertas”, algo que se incrementa el fin de semana, “que es cuando acude mucha gente”.

Entre sus reivindicaciones se encuentra también que Lejoan Busa tenga parada también en Las Vegas: “Queremos reducir el tráfico, nuestro Ayuntamiento aboga por ello (…) pero nosotros tenemos que coger el coche si o si para ir al ambulatorio o a cualquier actividad de ocio y deportiva porque no se nos facilita transporte público, por no hablar de lo que supone para la gente mayor y vulnerable, que no puede trasladarse sola y se ve aislada a nivel social, con todo lo que eso sabemos que supone”.
Años de promesas de los diferentes alcaldes
Las vecinas y vecinos de Las Vegas recuerdan que llevan años con la promesa de los diferentes alcaldes y alcaldesa de Leioa de mejorar la situación. “El año pasado nos prometieron la mejora de muchos puntos, creímos en sus promesas y nos engañaron, nos sentimos defraudados y aquí nos veis de vuelta 14 meses después”, convencidos de que han conseguido pequeñas cosas, pero “de lo realmente importante, nada de nada”, afirman con rotundided.

No obstante, saben que no están solos. “Hay más barrios con otros malestares, y también acumulando promesas incumplidas: Pinueta, SOS KURKUDI, Lamiako, Txorrieri…” Aseguran que están juntos “porque todos queremos un Leioa más amable, más seguro y saludable para todos los barrios y las personas que los habitan y transitan. Un Leioa del que sentirnos orgullos y del que podamos disfrutar de verdad. Un Leioa de todos y para todos, no sólo para los que viven en el centro. Todos tenemos que tener los mismos derechos, esté donde esté nuestro barrio.
Por eso, hoy han terminado la movilización expresando sentirse “muy agradecidos por todos los que nos habéis venido a acompañar, y hasta ilusionados viendo que otro modelo de participación es posible. Las personas de Leioa queremos una participación real”, han afirmado.