El 80% multas del radar móvil son para vehículos de fuera de Leioa

Se cumplen tres meses de la puesta en marcha del radar de velocidad móvil en las calles de Leioa. Desde entonces, la Policía Local ha tramitado más de doscientas denuncias, de las que el 20% han sido para vehículos de vecinos y vecinas de Leioa.

«Este dato refleja que la ciudadanía de Leioa está comprometida con el límite de velocidad del municipio y que son, en su mayoría, personas conductoras de otros municipios quienes incumplen la normativa de circular a 30 km/h.», según el ayuntamiento.

Esta fue una de las razones principales por las que el ayuntamiento se hizo con un radar móvil, ya que era previsible que los coches que atraviesan el municipio, muchos en lugar de circular por la Avanzada, eran los que, mayormente, incumplían con el límite de velocidad.“Queremos un municipio amable para el peatón y, sobre todo, para niños y niñas. El hecho de controlar la velocidad a 30 km/h nos ha reafirmado en un hecho que ya intuíamos; que los y las leioaztarras cumplen con las medidas de velocidad en el municipio, y que es la actitud de los y las conductoras de paso -que intentan restar minutos en su trayecto- lo que nos sobra en el municipio”, afirma el alcalde, Iban Rodriguez Etxebarria.

En marcha desde el pasado mes de marzo

El pasado 15 de marzo entró en funcionamiento el radar móvil de la Policía Local, con el objetivo de incrementar la seguridad de las calles del municipio. Así, tras varias semanas de pruebas en distintas zonas, las calles en las que suele estar presente el radar móvil son: Aldapabarrena, Avenida y barrio Elexalde, Avenida Iparragirre, Avenida de las Universidades, Gabriel Aresti, Estartetxe, Langileria, Larrarte, Laubide, Lekueder, Luis Bilbao Líbano, Mendibilbarri, San Bartolomé y Zarrageta.

Estas son vías especialmente sensibles por su cercanía a centros escolares y/o por lo observado por la Policía Local, junto con la demanda o denuncia de sus vecinos y vecinas por la alta velocidad que alcanzan los vehículos que las transitan y el peligro que generan. Son esos  los viales en los que se intensifica la vigilancia aunque se irán incorporando nuevas calles a medida que la Policía Local observe comportamientos incívicos en la conducción con respecto a la velocidad o a cualquier otra maniobra durante la conducción que genere peligro para la población.

“Creemos que se está consiguiendo el objetivo de reducir la velocidad del tráfico en nuestras calles” señala el alcalde, “priorizando el factor de concienciación” sobre la vigilancia de la velocidad de conducción con un radar propio, y «alejado del objetivo de recaudar, ya que el radar no trabaja de forma permanente, se instala de forma puntual y con carácter rotatorio según la circulación».

Los beneficios de contar con una velocidad máxima de 30 km/h en el municipio son múltiples, según los responsables municipales: favorece una ciudad más amable para peatones y ciclistas, reduce los atropellos y accidentes, y rebaja la contaminación del aire y las emisiones acústicas. «Esto ayuda a conseguir un modelo urbano de movilidad sostenible y en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible».

Además, la propia Dirección General de Tráfico (DGT) modificó a nivel estatal desde el pasado 11 de mayo el Reglamento General de Circulación que reduce a 30 Km/h la velocidad en vías urbanas en calles de un único carril por sentido (Art. 50. Límites de velocidad en vías urbanas y travesías).

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